Ciudad de México.- El ex canciller Marcelo Ebrard afirmó que la relación con la DEA ha sido un dolor de cabeza para México y acusó que las filtraciones en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador es una venganza por las obligaciones que el país le impuso en el marco de su operación en México.

En entrevista tras registrarse como candidato al Senado de Morena, dijo que su posición en el lugar siete de la lista de aspirantes plurinominales es producto de un acuerdo con la abanderada presidencial, Claudia Sheinbaum, además de que es su número de la suerte.

Ebrard concluyó su registro justo cuando arribaba Adán Augusto López, quien es el primer lugar en la lista. Ambos evitaron encontrarse e incluso el ex secretario de Gobernación buscó un acceso que no implicara encontrarse con el ex canciller, quien llegó acompañado por su esposa.

“No lo he visto, pero es un buen amigo, es un buen compañero y, además, lo felicito”, dijo Ebrard al ser cuestionado sobre la escena.

El ex canciller defendió a López Obrador ante los señalamientos en contra de él y del cercanos por presuntos vínculos con el crimen organizado.

Demandó que las acusaciones sean demostradas con pruebas y no mediante dichos de informantes.

“Que lo demuestren, no con un informante, digo, por favor, más cuando estás hablando del presidente de México. Yo creo que ahí sí, la exigencia debe ser: tienen elementos de prueba, tendría que haber un proceso en curso, no lo hay, ya lo dijo el Gobierno de los Estados Unidos”, indicó.

Ebrard advirtió que la relación con la DEA ha sido un “dolor de cabeza” para México y un problema en la relación con Estados Unidos. Incluso, responsabilizó a la agencia de haber puesto en riesgo en varias ocasiones la relación bilateral.

“La DEA ha sido un problema en la relación bilateral todo el tiempo, desde 1975, 76, al día de hoy. ¿Por qué? Porque usan mucho esto de que el informante dijo, de que nosotros estamos investigando a alguien, entonces hay que tomar en cuenta que ese ha sido el proceso de la DEA todo el tiempo en la relación bilateral, en muchas ocasiones han puesto en peligro la relación bilateral, muchas”, sostuvo.

El ex canciller afirmó que lo anterior le consta porque en el caso de la detención del General Salvador Cienfuegos, cuando él era titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, pidieron ver las pruebas en su contra, pero sólo mostraron mensajes de Whatsapp que salieron de teléfonos que ni siquiera fueron identificados.

Recordó que México es el único país que le impuso obligaciones legales a la DEA, entre ellas, informar al Gobierno, a través de la Embajada, sus actividades mensuales.

El candidato al Senado por la vía plurinominal señaló que este es el móvil de las filtraciones que en pleno proceso electoral tienen como objetivo poner en duda al presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Entonces, ahora estás en la venganza de la DEA por las obligaciones legales que se le han impuesto en México y que de una vez sepan que no sólo se van a mantener, van a ser más las exigencias precisamente por este actuar que han tenido”, adelantó.

Ebrard dijo que México no puede oponerse cuando la intervención de la DEA cuando ésta tenga como objetivo combatir actos delictivos, como en el caso de Genaro García Luna, pero criticó aquellos en los que no cuenta con elementos de prueba.

“A la luz de lo que viví con el General Cienfuegos, la DEA está actuando más allá de lo que puede demostrar, porque si pueden demostrar algo, entonces que inicien el proceso, y si no, es una guerra de medios, ¿contra quién?, contra el presidente de México. Lo que debemos decir es que eso es inaceptable”, reiteró.