Milton Morales Figueroa, el mando policial de la CDMX asesinado en el Estado de México, tenía a su cargo casi todas las indagatorias más difíciles, y aún no se puede establecer una sola línea de investigación por su atentado, afirmó el jefe de Gobierno, Martí Batres.

Un día después de que el comisario, uno de los hombres de confianza de Omar García Harfuch durante su cargo como secretario de Seguridad Ciudadana (SSC) de la capital, fuera asesinado en Coacalco, Batres calificó el hecho de muy lamentable.

“Era un elemento muy importante en tareas de investigación, tenía a su cargo investigaciones fundamentales, prácticamente todas las investigaciones de alto nivel, difíciles, de combate a las bandas delictivas, pasaban por su oficina”, destacó.

El jefe de Gobierno dijo lamentar la pérdida de la vida de Morales Figueroa y del papel que desempeñaba en las tareas de seguridad.

Elementos de la Policía y Fiscalía tanto de la Ciudad de México como del Estado de México, precisó, colaboran para esclarecer el hecho y dar con los responsables.

Batres sostuvo que son muy cuidadosos y cautelosos para no fijar algún tipo de línea de investigación, pues todavía no se puede señalar la causa o si el atentado vino de algún grupo delictivo.