Enrique Graue, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), afirmó que vienen semanas muy difíciles, por lo que pidió a la comunidad universitaria que se mantenga aislada y acate las medidas pertinentes para controlar la epidemia de coronavirus COVID-19.
“Yo los invito a que en estas semanas por delante redoblemos el ímpetu de nuestro trabajo: Al personal académico le pido que busque el contacto con sus alumnas y alumnos y al estudiantado a establecer, si no lo han hecho ya, contacto con sus docentes a fin de continuar con los contenidos de su plan de estudios, desde sus hogares, apoyándose en nuestros numerosos y variados recursos digitales”, dijo.
En un comunicado, Graue Wiechers agradeció al personal administrativo por la solidaridad que ha demostrado con la UNAM y con el país, toda vez que “la UNAM no se detiene”.
Adelantó que se seguirá informando sobre la evolución del quehacer universitario y de las determinaciones que se tomarán en relación con el ciclo escolar y los calendarios correspondientes.
“Se ha alcanzado un crecimiento exponencial en la educación a distancia. Contamos con más de 16 mil aulas virtuales y todos los recursos educativos que tenemos han sido puestos a disposición de todas y todos los universitarios”, explicó.
La UNAM y la lucha contra el COVID-19
El rector Graue informó que grupos de investigadores trabajan en la implementación de la prueba para la detección del COVID-19, quienes forman a otros académicos para ampliar las capacidades de diagnóstico.
Detalló que otro grupo de especialistas labora para detectar el COVID-19 entre la población universitaria, por lo que se han elaborado medios de transporte para las muestras biológicas del virus, los cuales han sido entregados a distintas instituciones del sector salud.
Agregó que también se realizó un censo de capacidades de infraestructura, para enfocar los esfuerzos al diseño de insumos y ventiladores.
“La organización académica ha explorado también las consecuencias que el aislamiento está provocando ya en nuestra sociedad y aquellas que irremediablemente se manifestarán cuando la emergencia haya sido levantada. Asimismo, nuestros académicos se han enfocado a conocer y prever los efectos que dicho aislamiento acarreará en el medio ambiente o en la salud mental de las personas”, señaló.
Graue Wiechers añadió que se han conjuntado esfuerzos y capacidades con otras universidades para realizar propuestas ante la crisis económica y social que enfrenta el país “y se han generado distintos modelos matemáticos que permiten predecir, hasta donde es posible, el comportamiento de las curvas de infección de esta pandemia”.
Por otra parte, recordó que desde hace tres semanas se acordó el paro presencial de las actividades académicas y culturales, así como que en algunos de los planteles el inicio del distanciamiento social alcanza ya casi cuatro semanas.
“Durante este periodo, la UNAM ha hecho lo que le corresponde. Con un enorme entusiasmo y con gran profesionalismo ha puesto el conocimiento y su inteligencia colectiva al servicio de México”, aseveró.