Prácticamente la totalidad de las empresas armadoras de autos en el Estado de México han tenido que realizar reducción de actividades o paros técnicos derivado de la falta de proveeduría de micro componentes que se han enfrentado en los últimos meses.

Elisa Crespo Ferrer, presidenta Ejecutiva del Cluster Automotriz del Estado de México, explicó que al momento las afectaciones suman más de 2 mil millones de dólares para el sector; empresas como Ford, General Motors, Volkswagen, Renault, Hunday, Kya y Toyota han tendió pérdidas significativas por el retraso.

Indicó que las empresas están resolviendo en la medida de lo posible el impacto por la falta de comodities y ésta se establece como una oportunidad para buscar nuevos proveedores, aunque este no es un proceso sencillo y su implementación tarda al menos seis meses.

Algunos de los países que podrían ser parte en este nuevo esquema de proveeduría son China, Sudáfrica, Asia del sur, Medio Oriente y de manera reciente Tailandia que está desarrollando tecnología e infraestructura eficiente en la materia.

Aún cuando haya avance en las líneas de producción y se espera que este año se tengan números similares en la producción de autopartes a los generados en 2019 aún se enfrenta un escenario complejo para el resto del año.

En muchos de los casos las empresas están avanzando en sus líneas de producción postergando el ensamble del tablero para el último momento cuando se tengan los implementos necesarios para concluir el proceso de ensamble.