La crisis sanitaria por el coronavirus (COVID-19) ha causado tal impacto económico en los países en desarrollo que Naciones Unidas pidió este lunes responder con una ayuda por valor de 2.5 billones de dólares a modo de un “plan Marshall” para contrarrestar el golpe.

Esa ayuda se dividiría en un billón de dólares en derechos especiales de giro, la condonación de deuda a esos países por valor de otro billón, y 500 mil millones para financiar el “plan Marshall” propiamente dicho en forma de subvenciones para la recuperación.

“La velocidad a la que las ondas expansivas de la pandemia están golpeando las economías en desarrollo es dramática, incluso en comparación con la crisis financiera global de 2008”, destaca en un comunicado la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD).