El numero de muertes ocasionadas por las altas temperaturas en la actual temporada de calor se duplicó en solo una semana, al pasar de 23 a 48, reportó la Secretaría de Salud. 

En su más reciente Informe Semanal para la Vigilancia Epidemiológica de Temperaturas Naturales Extremas, detalló que 42 de los decesos correspondieron a golpe de calor y 6 a deshidratación y que 14 ocurrieron en Veracruz, 8 en San Luis Potosí y 8 en Tabasco.

En tanto, indicó, el número de casos de daños a la salud por temperaturas naturales extremas aumentó de 670 a 956 entre las semanas epidemiológicas 19 y 20, que concluyó el 21 de mayo.

Durante la actual temporada de calor, que inició el 17 de marzo y concluye el 5 de octubre, reportó, el 64 por ciento correspondieron a golpe de calor, 33 a deshidratación y 3 a quemaduras.

Las entidades con mayor proporción de casos son Tabasco, con 18.6 por ciento del total nacional; Veracruz, con 13.6, y Nuevo León, con 8.9.

Para la semana epidemiológica 20 de 2023 el número de decesos por altas temperaturas era de solo 3 y el de daños a la salud de 237.

El país registra actualmente la tercera onda de calor del año, que inició el 20 de mayo y se prevé que concluya la semana próxima.

De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la temperatura máxima más elevada de esta onda de calor se reportó el pasado domingo, cuando se alcanzaron 48 grados Celsius en Huites, Sinaloa, y Valle Nacional.

La Ciudad de México rompió el pasado viernes, por segunda ocasión en el mes, su récord histórico de temperatura máxima al alcanzar los 34.4 grados.

Jorge Zavala Hidalgo, director del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC) de la UNAM, estimó la semana pasada que durante la actual de calor se registrarían récords de temperaturas máximas, además de la Ciudad de México, en Toluca, Cuernavaca, Querétaro, Pachuca, Tlaxcala, San Luis Potosí, Villahermosa y Campeche.

Advirtió además que además de daños directos a la salud, como los golpes de calor o la deshidratación, las altas temperaturas contribuyen a elevar los índices de contaminación atmosférica en las grandes ciudades.

“Estas condiciones se generan debido a la presencia de una circulación anticiclónica en niveles intermedios de la atmósfera, que está provocando temperaturas extremadamente altas en la meseta central, la meseta del norte y los estados del Golfo de México”, apuntó.

“Estas condiciones meteorológicas también propician incrementos en la demanda de energía, mala calidad del aire e incendios forestales”.