La empresa Monsanto desistió el martes de la demanda en contra del decreto presidencial de 2020 que busca prescindir del glifosato y el maíz transgénico para consumo humano en México, informó ayer la Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).
El Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt) aseguró que continuará avanzando en el cumplimiento del decreto y en cabal coordinación con el resto de las instancias de la Administración Pública Federal, hasta conseguir que los maíces transgénicos y el glifosato queden fuera de los alimentos de las familias mexicanas.
Mediante un comunicado el organismo recordó que la publicación del decreto presidencial para la restricción de esos dos productos devino en una avalancha de demandas de amparo promovidas por diversas empresas dedicadas a la comercialización de agrotóxicos u otros insumos agropecuarios, como granos y semillas, y organizaciones que representan a esas mismas empresas o a productores convencionales, en favor de los intereses de compañías trasnacionales y gigantes del oligopolio de la agricultura industrial.
Expuso que se trata de más de 30 juicios de amparo, a través de los cuales buscaban que el decreto fuera declarado inconstitucional y quedara sin efectos. Sin embargo, la gran mayoría de esos juicios están ya concluidos con resoluciones que no favorecieron a las empresas y asociaciones civiles.
“Esto llevó a que el decreto presidencial de 2020 se mantuviera firme, hasta que fue abrogado por uno nuevo en 2023 que reafirma lo establecido en el anterior y agrega la instrucción de sustituir gradualmente el maíz transgénico para consumo animal y uso industrial para consumo humano”, apuntó.
Añadió que uno de los procesos judiciales contra el decreto de 2020, activo hasta el martes pasado, fue el originado con la demanda principal y los recursos adhesivos de las empresas Semillas y Agroproductos Monsanto y Monsanto Comercial, filiales de la trasnacional Bayer, que, en 2018, concretó la compra del gigante de los agrotóxicos y la biotecnología transgénica, Monsanto Company.
“En el litigio, Conahcyt fue señalado como una de las autoridades responsables, por lo que esta institución ofreció cerca de 250 documentales que exhibían la evidencia científica y jurídica que da sustento a los argumentos plasmados en sendos informes justificados y promociones, en defensa del decreto presidencial”, destacó.
En julio de 2022, el juez Francisco Rebolledo Peña resolvió a favor de Monsanto con una sentencia controversial, contradictoria y parcial que omitía elementos fundamentales para la protección de los derechos humanos e ignoraba las pruebas aportadas por las autoridades. La sentencia fue recurrida por Semarnat, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y Conahcyt, quienes continuaron avanzando en el cumplimiento cabal del decreto.
Señaló que la empresa Monsanto ha tenido que pagar cientos de miles de millones de dólares por daños punitivos y arreglos en más de 100 mil juicios en Estados Unidos, en los que el glifosato fue relacionado con el desarrollo de cáncer, además de multas millonarias por publicidad engañosa.
“Conahcyt mantiene el apoyo a investigaciones humanísticas, científicas, tecnológicas e innovadoras para indagar presencia de transgenes y glifosato en granos, semillas y harina de maíz, lo que permitirá determinar las posibles rutas de dispersión, así como otras acciones sustantivas y fundamentales que contribuyan a garantizar el derecho humano del pueblo de México a una alimentación saludable”, concluyó el organismo.