Ciudad de México.- Las personas de altos ingresos en el país estimaron en medio millón de dólares (unos 8.8 millones de pesos al tipo de cambio actual) los ahorros necesarios para subsistir cómodamente durante la jubilación, que en promedio duraría 20 años contados a partir del momento del retiro, indicó HSBC. 

Si esta cantidad está lejos de ser alcanzada para el 60 por ciento de quienes “ganan bien” en México, el panorama para el resto de la masa poblacional luce complejo, preocupante y retador, muestra el informe de HSBC sobre calidad de vida 2023.

Indicó que en el país la edad de retiro deseable es de 60 años, aunque lo oficial es 65 años, mientras que la edad promedio de vida es de 84 años; se consideran personas de ingresos altos a aquellos que ganan 60 mil pesos mensuales o más.

Greg Hingston, director global de HSBC Seguros, destacó que las principales preocupaciones de los mexicanos relacionadas con la jubilación son el deterioro de la salud física con 49 por ciento, así como la inflación que disminuye el valor de los ahorros, con 42 por ciento.

“El 60 por ciento de la población de altos ingresos no lo ha alcanzado todavía, tiene 200-300 mil dólares. Las personas necesitan empezar a planear desde una edad más temprana su jubilación”, comentó en conferencia.

Marcelo Hernández, director de HSBC Seguros México recalcó que los mexicanos deben remoldear sus hábitos de planeación financiera, debido a que los ahorros actuales no alcanzarán para la jubilación y algo que agrava este hecho es el riesgo de longevidad, lo cuál significa que se necesitará más dinero para poder vivir por más tiempo.

“Es un reto tremendo para los mexicanos el ahorro para el retiro. Tenemos que estar plenamente conscientes de lo que tiene que pasar en mis siguientes 20 años productivos para que no le dé lata a mis hijos, a nadie, en mi etapa de la jubilación”, indicó.

Se estima que en México sólo 4 por ciento de la población percibe ingresos altos.

En general, hoy se necesita que las personas ahorren el 80 por ciento de su sueldo para poder vivir bien en la jubilación, lo cual es imposible por la cantidad de gasto diario que se requiere para vivir.