La Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró graves inconsistencias en las obras de la “K” invertida que realiza Comisión Nacional del Agua (Conagua) en el Sistema Cutzamala, y que tiene pendiente por aclarar 117 millones de pesos, alertó la diputada federal Aleida Alavez Ruiz.
Tras una solicitud de la legisladora de Morena para ampliar las auditorías sobre las obras efectuadas en el último trimestre de 2018, se advirtió el fracaso en la sustitución de un tramo de tubería del Sistema Cutzamala como resultado de una deficiente planeación, programación, presupuestación y ejecución del gasto.
Alavez Ruiz explicó que de acuerdo con la Auditoría de Cumplimiento a inversiones físicas 2018-5-16B00-22-0241-2019, que concluyó el 17 de octubre pasado, en términos generales la Conagua incumplió las disposiciones legales y normativas aplicables en la materia.
“Por algo, en mayo pasado la nueva administración de Conagua canceló los contratos a las empresas encargadas de estas reparaciones, que por cierto no fueron sancionadas por la administración anterior”, expuso en un comunicado.
En el segundo reporte del resultado de la Fiscalización de la Cuenta Pública 2018, que la ASF entregó el 31 de octubre pasado, se señala que se determinaron 19 resultados, de los cuales en ocho no hubo irregularidades y uno fue solventado por la entidad fiscalizada antes de la emisión de este reporte.
Sin embargo, los 10 restantes generaron ocho Promociones de Responsabilidad Administrativa Sancionatoria y seis Pliegos de Observaciones, añadió la diputada federal.
Aunque en el transcurso de la auditoría se emitieron oficios para solicitar la intervención del Órgano Interno de Control y de las autoridades recaudatorias, recalcó que se esperarán a que concluyan los procesos emprendidos por las autoridades competentes.
“Esperaremos a que concluya el análisis y procesos emprendidos por la ASF y de la propia Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados, para que se pueda determinar lo conducente”, enfatizó.
Recordó que los trabajos en el Cutzamala, que se llevaron a cabo en octubre y noviembre de 2018, afectaron a más de ocho millones de habitantes de 13 alcaldías de la Ciudad de México y 13 municipios conurbados del Estado de México.