Michelle Bachelet, alta comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, cuestionó la política que sigue Australia contra los migrantes y alertó contra culparlos de los problemas de un país, práctica que no se limita a dicha nación.
“En todo el mundo vemos políticos y líderes de opinión listos a demonizar a la gente más vulnerable y marginada de la sociedad para obtener ganancias políticas”, dijo en una conferencia en el Whitlam Institute de la Western Sydney University.
Las palabras de la ex presidenta de Chile se refirieron a la promesa de campaña del actual primer ministro Scott Morrison, que limitó a 18 mil 750 el número de refugiados que aceptaría Australia cada año, y endureció los requisitos para las acogidas.
“Se trata de seres humanos que buscan seguridad y dignidad. Son víctimas, no criminales”, enfatizó en el discurso central del evento organizado por el WhitlamInstitute, que se precia de ser un centro para el diálogo y el debate sobre las políticas públicas.
“Si se rechaza el diálogo, la inclusión, el respeto y la justicia, estamos dando una oportunidad a la injusticia, la crueldad, el resentimiento y las tensiones, que pueden alimentar conflictos más grandes”, dijo citada por la Australian Broadcasting Corporation (ABC).
Al recordar la protesta mundial que esta semana realiza Extinction Rebellion en materia climática, llamó a que los líderes políticos, sociales y de negocios, fomenten la participación de los jóvenes en los temas que ahora delinean sus vidas.
“Más que una actitud cínica hacia el valor de la participación, los líderes políticos, económicos y sociales deben comentar que la gente defienda las políticas que se alineen con nuestras convicciones personales e ideales”, concluyó.