Cerca de las 04:00 horas de este miércoles, Morena y sus aliados avalaron en lo general y particular, con 86 votos en favor y 41 en contra, la reforma judicial. El planteamiento de 80 reservas duró más de tres horas, sin embargo, ninguna prosperó.
Ahora, los jueces, magistrados y ministros de la Corte serán electos en urnas en 2025 y se instalará un tribunal de disciplina para castigar a juzgadores.
La reforma cambia de raíz al Poder Judicial y la Oposición acusó que eso provocará su dependencia del partido en el Gobierno y su pérdida de autonomía.
El golpe definitivo fue consumado tras lograr la adhesión del senador panista de Veracruz Miguel Ángel Yunes Márquez, quien dio el voto decisivo para darle la mayoría calificada a la 4T.
Morena y aliados, que sumaban 85 senadores, necesitaban uno más para la validación constitucional de la reforma.
Con la suma de Yunes, quien en versiones de panistas fue presionado para ceder su voto a cambio de no perseguirlo ni a él ni a su padre Miguel Ángel Yunes Linares (suplente en la senaduría), y la ausencia de Daniel Barreda, legislador emecista por Campeche, fue suficiente para la aprobación.
El coordinador de MC, Clemente Castañeda, denunció que Barreda había sido retenido ilegalmente luego de la detención de su padre ayer en la madrugada.
Durante todo el día, Barreda no apareció públicamente y fue hasta casi la medianoche que en un video dijo que había acudido en apoyo a su papá y por eso no había viajado a la CDMX para la sesión. No explicó la circunstancia de la presunta detención de su padre.
En lo general, la votación final, adoptada en la sede alterna de Xicoténcatl, se informó entre opositores rodeando la Mesa Directiva y con manifestaciones en calles aledañas al Senado.
“La reforma va, la reforma va”, coreaban jubilosos los morenistas a la medianoche tras la votación.
Por la tarde, estudiantes de Derecho y trabajadores del Poder Judicial, enardecidos, habían tomado el Senado de la República, por lo cual Morena trasladó la sesión a la antigua sede de Xicoténcatl, cuyos accesos fueron resguardados por cientos de policías antimotines.
La esperanza que recaía en los 43 senadores del PAN, PRI y MC para bloquear la reforma se desvaneció desde el mediodía, cuando se conoció que el panista Yunes Márquez solicitó licencia por razones de salud.
Fue llamado a sustituirlo su padre, Miguel Ángel Yunes Linares, acérrimo enemigo de AMLO y de Morena.
El veracruzano fue recibido en el Pleno senatorial entre ovaciones de morenistas y gritos de “traidor” de parte de los panistas.
Yunes Linares se enfrascó en un pleito con el senador Marko Cortés, dirigente nacional del PAN; mientras el primero le reprochó beneficiarse del voto hacia el PAN para ocupar un escaño plurinominal, el segundo no se cansó de espetarle su traición.
Para la tarde, Yunes Márquez, supuestamente enfermo, se presentó a la sesión y votó en favor de la reforma de AMLO.